Tanta prisa tenemos por hacer, escribir y dejar oír nuestra voz en el silencio de la eternidad, que olvidamos lo único realmente importante: vivir.
domingo, febrero 05, 2012
Hoy quiero mirar el mundo con ojos llenos de amor; ser paciente, comprensiva, humilde, suave y buena. Ver detrás de las apariencias a tus hijos, como los ves Tú mismo, para, así, poder apreciar la bondad de cada uno. Cierra mis oídos a toda murmuración, guarda mi lengua de toda maledicencia, que sólo los pensamientos que bendigan permanezcan en mí. Quiero ser tan bien intencionado y justo que todos los que se acerquen a mí, sientan tu presencia. Revísteme de tu bondad, Señor, y haz que durante este día, yo te refleje. Amén
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